Esta receta requiere bastante tiempo de horno aunque a baja temperatura y es ideal para hacerla un sábado o un domingo de lluvia en el que no apetece salir de casa.
Una vez hechos los tomates confitados los podremos conservar en un tarro cubierto de aceite durante al menos 1 mes.
Ingredientes
- 14-20 tomates de mata maduros (el número de tomates dependerá del tamaño de la bandeja de horno que usemos)
- una cabeza de ajo
- aceite de oliva
- sal
- azúcar
- pimienta negra
- hierbas aromáticas (tomillo, romero…)
Preparación
En primer lugar retiraremos el pedúnculo y haremos una cruz en la base de cada uno de los tomates.
Escaldamos los tomates durante unos 10 segundos y los enfriamos en agua con hielo.
Pelamos los tomates, los cortamos en 2 mitades y les quitamos las semillas y el agua de vegetación.
Metemos los tomates en un bol, añadimos sal, azúcar, pimienta negra, las hierbas aromáticas y un buen chorro de aceite.
Removemos bien y a continuación los colocamos en una fuente de horno con papel sulfurizado en el fondo con el lado abombado hacia arriba.
Metemos en el horno durante 3 horas a 90 ºC.
Sacamos la bandeja del horno y damos la vuelta a los tomates.
Volvemos a meterlos en el horno durante otras 3 horas a 90 ºC.
Sacamos los tomates del horno, los dejamos enfriar y los metemos en un tarro cubiertos de aceite.